No pudo ser. El Abadiño llegaba a Basauri con una ventaja de tres puntos y sabiendo que ganando o empatando teníamos el ascenso asegurado prácticamente. Partido muy complicado frente a un rival muy potente. El Abadiño no entró tan bien al partido como el Indartsu y fue superado por el rival. La primera parte se caracterizó porque el Indartsu es quien más dominó y el conjunto verdiblanco jugaba con una prisa e imprecisiones no características de su juego. El resultado en el descanso era 2-0 desfavorable a los verdiblancos. En esta segunda mitad, el Abadiño comenzó mucho mejor y es cierto que se igualó mucho el partido. En una de estas, Alain cogía un rechace y marcaba el 2-1. Acto seguido, el Abadiño se volcó aún más en el ataque y tuvo dos ocasiones clarísimas seguidas. Una en la que el portero del Indartsu impidió el gol y en la siguiente el palo. Una jugada que podría haber cambiado el rumbo del partido, pero en el fútbol no valen los “casis” ni la justicia, solo valen los goles al final en el resultado. El Indartsu marcaba el tercero y empataba así con el resultado de la ida en la que los verdiblancos fueron los vencedores. El cuarto y quinto llegaban casi de la mano, imposibilitando cualquier remontada y marcando el gol average a favor de los basauritarras. Al final, del partido en una jugada muy buena de Dani el Indartsu se marcaba un gol en propia puerta haciendo el 5-2 final. Los jugadores del Abadiño de esta manera perdían el segundo partido de esta temporada y se les quitaba el privilegio de depender de ellos mismos. Las opciones a subir ahora han bajado, pero este equipo seguirá a buscar los 6 puntos de 6 que quedan y esperar algunos resultados favorables por parte de otros equipos para poder seguir buscando el ascenso.
Fue un palo duro lo del domingo en Basauri pero no debemos olvidar una cosa, sin dejarnos en el tintero todas las opciones que hay. La temporada de este equipo no la va a empañar el conseguir o no el ascenso. Por ahora 62 puntos conseguidos de 84. 28 jornadas sin repetir once. Un equipo que tanto en las malas como en las buenas permanece unido. Un equipo del que estamos más que orgullosos. Un equipo que siempre ha dejado alto el pabellón y nunca se ha rendido. Equipo por el cual cualquier entrenador pagaría por estar. Un grupo que se auto-entrena y se auto-exige al máximo. Ha sido un placer enorme estar este año con este grupo. Mi familia con estos jugadores ha crecido. Este año igual no nos llevamos el ascenso, que seguiremos peleando por él, pero me llevo algo más importante. Me llevo hermanos pequeños que nadie me va a arrebatar. Gracias sinceramente por este pedazo de año chavales. Seguiremos luchando y construyendo la pirámide marcada en el inicio del año. #WeAreAbadiñoKE
Leave A Comment